Ansiedad

Derrotando al enemigo: vencer a la ansiedad

El mal de la ansiedad es uno de los temas recurrentes en nuestra época. Arrastrada por muchos en el día a día, es el agujero negro que lo atrapa y lo consume todo, como una especie de enemigo.

A continuación, hablaremos de hábitos o de rutinas específicas, que pueden controlar la ansiedad.

Simplemente se ha de poner voluntad, ser constante y no dejar para mañana aquello que podamos hacer hoy. Se trata de rituales útiles, escudos cognitivos y conductuales con los que controlar la incertidumbre, aportando calma, estructura y orden.

 

Respiración profunda antes de empezar una actividad

Es uno de los hábitos más comunes para vencer la ansiedad.

Para que esta tenga efecto, se deben fijar unos momentos del día en los que al menos se deben dedicar tres minutos para practicarla.

Lo ideal es hacerlo justo al levantarnos, antes de empezar a trabajar, antes de cada comida y antes de dormir.

Ritual del movimiento

Este ritual sirve principalmente para agitar y despejar las preocupaciones. Se puede salir a correr, hacer ejercicios de alta intensidad en momentos puntuales en los que se necesite, practicar yoga.

Autocuidado a diario

Una vez al día, durante al menos una o dos horas se debe dedicar tiempo a uno mismo. Hacer una comida que guste, estar en silencio sin hacer nada.

Pintar piedras con colores para hacer frente a miedo y preocupaciones

La elección de colores y la fluctuación de los mismos permiten relajarse. En este caso, se deben escoger una serie de piedras, y cada una de ellas representará un miedo o una preocupación. Para vencerla, se creará un dibujo sobre la misma, algo creativo con colores amables.

Anclaje positivo

El hábito de anclaje positivo puede resultar muy útil. Principalmente, consiste en dos fases.En la primera, se debe organizar una experiencia positiva y reconfortante, como por ejemplo sería un paseo por la playa o la montaña. En el momento en el que nos encontremos en medio de la experiencia, se ha de ser consciente de las emociones sentidas, y estas deben ser guardadas en el cerebro. Ipso facto, se elegirá un objeto del entorno al cual se transmitirán las mencionadas emociones, actuando como una especie de talismán.

Tiempo en soledad, tiempo sano

El hábito de establecer un espacio de tiempo para estar solo es útil para controlar la ansiedad. Se tratan de espacios en los que, sencillamente, frenamos. Se trata de un lugar de descompresión, en el que tener tiempo para penar y a estar con nosotros.

Escrito por: Dra. Olga San Martino Pomés - 06.09.2018.

Fuente: https://www.topdoctors.es